Una mala alimentación es la causa de la mitad de las muertes por infarto, ictus y diabetes tipo 2 | Por: @rigotordoc
Según demuestra un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad Tufts en Boston (EE.UU.), publicado en la revista «JAMA», el consumo subóptimo de alimentos fue responsable de cerca de la mitad de todas las muertes ocasionadas por cardiopatía isquémica coronarias, los ictus y la diabetes tipo 2 en Estados Unidos en el año 2012.
De hecho, las enfermedades cardiovasculares son responsables de cerca de 17,5 millones de decesos anuales, por lo que son la primera causa de mortalidad en todo el mundo. Una cifra que, ya muy significativa de por sí, alcanza proporciones aún mayores cuando a los decesos cardiovasculares se les suman los causados por las patologías metabólicas, muy especialmente por la diabetes tipo 2. Pero, ¿qué se puede hacer para frenar esta letalidad de las enfermedades cardiometabólicas? Pues básicamente, adoptar unos hábitos de vida saludables, caso sobre todo de seguir una dieta adecuada.
Como explica Renata Micha, directora de esta investigación, «nuestros hallazgos deben ayudar a identificar las prioridades en salud pública y a planificar las estrategias para modificar los hábitos dietéticos y mejorar la salud».
Alimentación no tan saludable
Los hábitos dietéticos tienen un papel fundamental sobre la aparición y progresión de muchos factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares y metabólicas, llamadas también enfermedades cardiometabólicas. Así lo han demostrado infinidad de estudios desarrollados en las últimas décadas. Pero, ¿cuál es el grado de influencia de estos hábitos dietéticos sobre la salud cardiometabólica? ¿Es posible identificar qué papel juega cada tipo de alimento sobre el riesgo de mortalidad por una enfermedad coronaria, un ictus o la diabetes tipo 2?
Para responder a esta pregunta, los autores han analizado el impacto del consumo de 10 nutrientes o alimentos sobre la mortalidad cardiometabólica de la población estadounidense. Y para ello, han tomado como referencia los resultados de los ensayos clínicos desarrollados para evaluar la asociación entre los distintos tipos de dieta y las enfermedades cardiovasculares y/o metabólicas y los datos de los registros estadísticos y epidemiológicos del país.
Y exactamente, ¿cuáles han sido los alimentos o nutrientes evaluados? Pues las frutas, las verduras, las nueces y otros tipos de frutos secos, los cereales integrales, las carnes rojas no procesadas, las carnes procesadas, las bebidas azucaradas, los ácidos poliinsaturados, los ácidos grasos omega-3 procedentes del pescado, y el sodio –o lo que es lo mismo, la sal.
De acuerdo con los resultados, en 2012 se registraron en Estados Unidos un total de 702.308 decesos en adultos atribuibles a las enfermedades cardiometabólicas. Y de las mismas, hasta un 45% –318.656 fallecimientos– fueron causadas por un ‘consumo subóptimo’ de los 10 alimentos y nutrientes referidos, ya sea por una ingesta insuficiente de los saludables y un exceso de aquellos más ‘insalubres’.
En 2012, se produjeron 70.2308 muertes cardiometabólicas en adultos estadounidenses, incluyendo 506.100 por enfermedades del corazón (371.266 cardiopatías coronarias, 35.019 cardiopatías hipertensivas y 99.815 otras enfermedades cardiovasculares), 128.294 secundarias a ictus (anteriormente llamados accidentes cerebrovasculares), (16.125 isquémicos, 32.591 hemorrágicos y 79.578 otros), y 67.914 debidas a diabetes tipo 2. De éstos, se estima que 318.656 (45.4%) muertes cardiometabólicas por año se asociaron con ingesta subóptima (48.6% de muertes cardiometabólicas en hombres y 41.8% en mujeres), 64,2% en edades más jóvenes (25-34 años) y 35,7% a mayores edades (≥75 años); 53,1% entre los negros, 50,0% entre los hispanos y 42,8% entre los blancos; a su vez, 46,8% entre las personas con un nivel educativo más bajo, 45,7% entre aquellas con un mediano nivel educativo y 39,1% entre las personas con alto nivel educativo.
El mayor número de muertes cardiometabólicas estimadas relacionadas con la dieta fueron asociadas con alto contenido de sodio (66.508 muertes en 2012; 9,5% de todas las muertes cardiometabólicas), baja ingesta de frutos secos / semillas (59.374; 8,5%), alta ingesta de carnes procesadas (57.766; 8,2%), baja ingesta de grasas omega-3 de pescados marinos (54.626; 7,8%), baja ingesta de hortalizas y vegetales (53.410; 7,6%), baja ingesta de frutas (52.547; 7,5%) y alto consumo de bebidas endulzadas con azúcar (51.694; 7,4%).
Entre 2.002 y 2.012, las muertes cardiometabólicas poblacionales ajustadas por año en los Estados Unidos disminuyeron un 26,5%. Se observaron mejoras en la ingesta nacional de algunos factores, como grasas poliinsaturadas, nueces / semillas, bebidas endulzadas con azúcar, granos enteros y frutas. Así, el número absoluto de muertes cardiometabólicas relacionadas con la dieta disminuyó para todos los factores dietéticos. Como porcentaje de las muertes cardiometabólicas anuales, que explica las tendencias subyacentes en las tasas de mortalidad absolutas, la mortalidad asociada a la dieta se redujo para las grasas poliinsaturadas (-20.8% menor proporción de muertes), nueces / semillas (-18.0%) y bebidas endulzadas con azúcar (-14,5%); se mantuvo relativamente estable para los granos enteros, frutas, verduras, pescado, grasas omega-3 y carnes procesadas y aumentó para el sodio (+5,8%) y carnes rojas sin procesar (+ 14,4%) (Figura 3).
Mayor impacto en varones
Y esta mortalidad cardiometabólica asociada al consumo subóptimo de factores dietéticos, ¿afectó por igual a todos los grupos de población? Pues no, fue mayor en la población joven –frente a los más mayores– y en las personas con menor nivel educativo.
Es más; como concluye Renata Micha, «en lo referente al sexo, se estima que la mortalidad asociada a los hábitos dietéticos fue proporcionalmente mayor en los varones que en las mujeres, un hallazgo que es consistente con los, por lo general, hábitos dietéticos menos saludables en la población masculina».
Fuente: Renata Micha, RD, PhD1; Jose L. Peñalvo, PhD1; Frederick Cudhea, PhD1; et al. Association Between Dietary Factors and Mortality From Heart Disease, Stroke, and Type 2 Diabetes in the United States. JAMA. 2017;317(9):912-924 /abc.es
.
Dr. Rigoberto J. Marcano Pasquier @rigotordoc
Medicina Interna
Ambulatorio Medis.
Av. José María Vargas. Centro Comercial Santa Fe.
Nivel C3. Consultorio 2.
Caracas. Venezuela.