Confirman que uso de cámaras bronceadoras duplica riesgo de cáncer de piel | Por: @linternista
En el Congreso Mundial de Cáncer de Piel que se celebró en Edimburgo (Escocia) se divulgó un estudio que vuelve a poner sobre el tapete el carácter nocivo de las cámaras bronceadoras.
Harry Moseley, profesor de la Universidad de Dundee, en Escocia, y autor de la investigación, aseguró que “encontramos que si una persona de entre 20 y 35 años usa una cama solar por ocho minutos una vez a la semana en promedio, su riesgo de tener un tipo específico de cáncer a los 55 años se duplica”.
Las advertencias en torno al uso de cámaras de bronceado suelen centrarse en el cáncer conocido como melanoma, el más agresivo de todos que suele asociarse con quemaduras de piel ocurridas por someterse a largas sesiones de bronceo.
Pero Moseley y sus colegas demostraron que, incluso los bronceados comunes, con camas solares durante un período prolongado, aumentan el riesgo de otro tipo de tumor más común: el carcinoma espinocelular o epidermoide. Se trata de un cáncer cuya peligrosidad está particularmente dada por su capacidad de hacer metástasis a otras partes del cuerpo.
Moseley agregó que el riesgo de este carcinoma espinocelular es aún mayor cuando la gente se expone a camas solares de alta radiación, que aceleran el bronceado. “En ese caso –insistió– el riesgo se triplica a un 200 por ciento”.
En julio del 2009, el Centro Internacional para la Investigación sobre el Cáncer, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), elevó a la categoría de cancerígenos los rayos ultravioleta (UVA) de las cámaras de bronceo, y ubicó su riesgo al mismo nivel del asbesto, el arsénico, el gas mostaza y de decenas de sustancias nocivas que tiene el cigarrillo.
Hace más de dos décadas que los UV solares (A, B y C), al igual que los UVA artificiales de lámparas, camas y cámaras de bronceo, figuraban en el nivel 2 de la clasificación de este Centro (posibles efectos carcinogénicos no demostrados).
Hace cinco años, con una abultada evidencia científica en la mano, esta agencia de la OMS elevó todos los ultravioleta a la clasificación uno, es decir, a la misma en la que entran las sustancias y factores efectivamente considerados cancerígenos para el ser humano.
Aprueban nuevo fármaco
La agencia estadounidense de alimentos y medicamentos, FDA, autorizó el uso de una nueva terapia experimental inmunológica empleando una droga denominada Keytruda para combatir el melanoma avanzado, entre pacientes que no responden a otros tratamientos.
También conocida como pembrolizumab, la droga es la sexta innovación en las terapias para combatir este mortal cáncer de piel autorizado por la FDA que desde 2011.
Keytruda, desarrollada por la farmacéutica Merck, «es la primera droga avalada para bloquear el componente celular llamado PD-1, que impide al sistema inmunológico combatir las células cancerígenas», indicó la FDA en un comunicado.
«Keytruda se puede utilizar después del tratamiento con ipilimumab, un tipo de inmunoterapia» existente, agregó la nota.
El melanoma, una forma de tumor muy agresiva en las células responsables de la pigmentación de la piel, representa cerca del 5% de los nuevos casos de cáncer diagnosticados en Estados Unidos.
Cada año, más de 76.000 estadounidenses son diagnosticados con cáncer de piel y cerca de 10,000 han fallecido, precisó la FDA.
La institución Alianza para la Investigación del Melanoma calificó la aprobación del medicamento como un «gran avance» y señaló que el 69% de los pacientes tratados con pembrolizumab mejoraron después de un año.
«La noticia es extremadamente emocionante y demuestra cuán lejos se ha llegado en este campo en los últimos años», afirmó Debra Black, cofundadora y miembro de la junta de la FDA.
Las otras drogas aprobadas por la FDA contra el melanoma incluyen a ipilimumab (2011), peginterferon alfa-2b (2011), vemurafenib (2011), dabrafenib (2013) y el trametinib (2013).
«Keytruda fue considerada una terapia innovadora y aceleró la revisión de la FDA porque la evidencia clínica preliminar demostró que la droga es sustancialmente mejor que las otras terapias», afirmó la FDA.
Tom Stutz, cuyo melanoma se ha expandido en su cuerpo, es uno de los pacientes que participaron en el estudio de la droga desarrollado en la Universidad de California, Los Angeles (UCLA). «La droga salvó mi vida», aseguró.
Fuentes: El Tiempo, BBC, Guiamedica.hn.
Daniel Ricardo Hernández @danielricardoh
Comunicador Social