Los cigarrillos electrónicos tienen el potencial de inducir marcadas consecuencias adversas cardiovasculares, pulmonares y cerebrovasculares | Por: @rigotordoc
Según los resultados de un trabajo que se publicó el 13 de noviembre de 2019 en «European Heart Journal» los cigarrillos electrónicos tienen el potencial de inducir marcadas consecuencias adversas cardiovasculares, pulmonares y cerebrovasculares. La exposición al vapor del cigarrillo electrónico aumenta el estrés oxidativo vascular, cerebral y pulmonar.
Los resultados del estudio identifican el aldehído de acroleína como un mediador clave de las consecuencias vasculares adversas observadas. Dado que el uso de cigarrillos electrónicos está aumentando, particularmente entre los jóvenes, los datos sugieren que se requieren medidas agresivas para limitar sus riesgos para la salud.
Los cigarrillos electrónicos (e) se han comercializado como una alternativa «saludable» a los cigarrillos combustibles tradicionales y como un método eficaz para dejar de fumar. Como consecuencia, ha habido un rápido crecimiento del uso de cigarrillos electrónicos, particularmente en los jóvenes, de modo que en 2014 los cigarrillos electrónicos eran el producto de tabaco más utilizado en los Estados Unidos.
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. informa que entre los estudiantes de secundaria, el uso de cigarrillos electrónicos aumentó notablemente del 1.5% al 20.8% (∼3.05 millones de estudiantes) entre 2011 y 2018. Este rápido aumento en los cigarrillos electrónicos ha generado preocupación por los efectos adversos para la salud de los estudiantes de secundaria y preparatoria.
Esta preocupación se ve agravada por el reciente lanzamiento de dispositivos de vapeo con alto contenido de nicotina sin una comprensión completa de las consecuencias para la salud. Los informes recientes de los CDC, la Agencia de Alimentos y Medicamentos (FDA) y los Departamentos de Salud del Estado sobre las investigaciones en curso sobre enfermedades pulmonares graves y muertes entre personas que usan cigarrillos electrónicos y un informe preliminar de una investigación coordinada de salud pública también generan una preocupación importante.
De hecho, los cigarrillos electrónicos están implicados en la disfunción endotelial y el estrés oxidativo en la vasculatura y los pulmones. Los mecanismos subyacentes a estos efectos secundarios siguen sin estar claros.
Thomas Münzel, del Centro Médico Universitario de Mainz (Alemania), quien dirigió el estudio, subraya que los cigarrillos electrónicos son tan peligrosos y adictivos que los países deberían considerar prohibirlos, acciones que países como India, Brasil, Singapur, México y Tailandia ya han tomado.
«Necesitamos centrarnos en los más jóvenes porque este es, con mucho, el mercado más grande -destaca-. El vapeo, que en realidad estaba destinado a ayudar a los fumadores a dejar de fumar, se ha convertido en una tendencia entre los jóvenes de algunos países, como EE.UU., que conduce a la adicción a la nicotina, incluso entre aquellos que no habían fumado antes».
Münzel considera que los gobiernos deberían evitar que los jóvenes tengan acceso a los productos del tabaco, gravarlos con impuestos, frenar su comercialización, educar a los adolescentes y a sus familias sobre los peligros de los productos del tabaco e intensificar la investigación sobre las consecuencias adversas para la salud del vaporizador. «No podemos permitir que toda una generación se vuelva adicta a la nicotina», advierte.
La investigación
Los investigadores investigaron el efecto del vapor del cigarrillo electrónico sobre el flujo sanguíneo en la arteria braquial en la parte superior del brazo en 20 fumadores sanos antes de vapear y 15 minutos después.
Los participantes fueron expuestos a vapor que contiene nicotina de un dispositivo de cigarrillo electrónico disponible en el mercado (Joyetech e-Go C). La función endotelial se evaluó en fumadores midiendo la dilatación mediada por flujo (FMD por sus siglas en inglés) y la constricción mediada por flujo bajo (FMC, por sus siglas en inglés) de la arteria braquial antes y 15 minutos después del vapeo del cigarrillo electrónico utilizando nuestros métodos establecidos.
La tonometría arterial se usó para medir la velocidad de corte y la perfusión de la piel, así como la rigidez arterial se midió por el tiempo de tránsito del pulso (PTT) y la velocidad de la onda del pulso (PWV).
Además, expusieron a 151 ratones al vapor del cigarrillo durante uno, tres o cinco días durante 20 minutos, seis veces al día. El líquido del cigarrillo electrónico utilizado para exposiciones (GermanFlavours, Alemania) consistía en 50% de propilenglicol, 50% de glicerol vegetal y no contenía saborizante adicional.
En fumadores sanos (n = 20), la exposición al vapor del cigarrillo electrónico redujo la FMD, aumentó la FMC (por tendencia clara), disminuyó el PTT y aumentó el VPP (Figura 1A-C), lo que indica claramente una inducción profunda de disfunción endotelial, rigidez arterial y perfusión de la piel (75.67 ± 47.73 vs. 41.90 ± 50.31; P = 0.009) por vapeo de cigarrillo electrónico.
Los hábitos de fumar se caracterizaron por un consumo real diario de cigarrillos de tabaco de 14 ± 5.03 y un uso a largo plazo de 11.6 ± 8.0 paquetes por año. El sesenta y cinco por ciento de los voluntarios tuvieron al menos 1 y 15%> 4 intentos en el pasado para dejar de fumar.
Los resultados en los fumadores mostraron que bastaba un único vapeo para aumentar la frecuencia cardíaca y provocar que las arterias se endurecieran y que el revestimiento interno de las arterias, el endotelio, dejara de funcionar correctamente. El endotelio es responsable de mantener la dilatación y constricción correctas de los vasos sanguíneos, protege los tejidos de sustancias tóxicas y regula la inflamación y los procesos de coagulación sanguínea. La disfunción endotelial está involucrada en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares.
En los ratones, los investigadores vieron que una enzima llamada NOX-2 era responsable del daño a los vasos sanguíneos, incluidos los pulmones y el cerebro, como resultado del vapor del cigarrillo electrónico. NOX-2 está involucrado en las defensas del organismo frente a las bacterias y en un proceso llamado estrés oxidativo, un desequilibrio entre los radicales libres y los antioxidantes en el cuerpo. Los ratones que no pudieron producir NOX-2 estaban protegidos de los efectos dañinos del vapeo.
Cuando los ratones fueron tratados con macitentán (un medicamento utilizado para la disfunción endotelial, el aumento de la presión arterial en los vasos y los pulmones y el estrés oxidativo) o bepridil (utilizado para tratar el estrés oxidativo y la muerte celular en casos de hipertensión arterial, angina o dolor en el pecho) no se observaron signos de disfunción endotelial, estrés oxidativo o inflamación.
Los efectos beneficiosos de estos medicamentos sugirieron un papel central de un compuesto químico del cuerpo llamado endotelina 1, que está involucrado en el estrechamiento de las arterias, y una proteína llamada FOXO-3, que protege contra el estrés oxidativo.
«Los resultados de estos estudios identificaron varios mecanismos moleculares por los que los cigarrillos electrónicos pueden dañar los vasos sanguíneos, los pulmones, el corazón y el cerebro. Esto es una consecuencia de los químicos tóxicos que se producen por el proceso de vapeo y también pueden estar presente en concentraciones más bajas en el mismo líquido. Además, identificamos una enzima, NOX-2, que medió todos los efectos de los cigarrillos electrónicos en el cerebro y el sistema cardiovascular, y descubrimos que se produce un químico tóxico llamado acroleína, que se produce cuando el líquido en los cigarrillos electrónicos se vaporiza y se activan los efectos dañinos del NOX-2».
«El beneficio de la terapia con macitentan y bepridil indica que los cigarrillos electrónicos tienen la capacidad de provocar la constricción de los vasos sanguíneos y dañar los sistemas antioxidantes y de supervivencia de nuestras células».
Con los estudios actuales, se demostró que la exposición aguda al vapor del cigarrillo electrónico causa disfunción endotelial en fumadores crónicos, induce inflamación y estrés oxidativo en el tejido vascular y cerebral, y aumenta la presión arterial en animales de experimentación.
Es importante destacar que se identificó al NOX-2 como una fuente importante de estrés e inflamación oxidativos vasculares impulsados por cigarrillos electrónicos con un papel importante de la señalización de ET-1 y FOXO-3 en el agravamiento o la prevención de estos efectos adversos.
Finalmente, se estableció que los aldehídos producidos durante la vaporización estaban presentes in vivo y eran suficientes para producir estrés oxidativo impulsado por NOX-2 e inflamación. Si se considera la epidemia en curso del uso de cigarrillos electrónicos entre los adolescentes, los datos brindan una fuerte advertencia de que la «seguridad» percibida de estos productos (en comparación con el tabaco) no está justificada, lo cual está en buena conformidad con una reciente revisión sistemática de la literatura que concluye que «el cigarrillo electrónico no debe etiquetarse como un producto cardiovascular seguro».
Los investigadores concluyen que sus datos pueden indicar que los cigarrillos electrónicos «no son una alternativa saludable a los cigarrillos tradicionales», y su «seguridad percibida no está garantizada».
Para Münzel, además, «aunque no tenemos experiencia sobre los efectos secundarios para la salud de los cigarrillos electrónicos derivados del uso a largo plazo, la epidemia de cigarrillos electrónicos que se está produciendo en EE. UU. y Europa, en particular entre nuestros jóvenes, está promoviendo una generación de personas adictas a la nicotina que están en peligro por el estímulo de cambiar los cigarrillos tradicionales por cigarrillos electrónicos».
Por último, los investigadores subrayan que una fortaleza de su trabajo es que no han recibido fondos de la industria de los cigarrillos electrónicos. «Estudios recientes muestran que hay una mayor posibilidad de que los resultados de estudios financiados indiquen que los cigarrillos electrónicos son inofensivos», concluyen.
Referencias:
- Marin Kuntic, Matthias Oelze, Sebastian Steven, Thomas Münzel et al. Short-term e-cigarette vapour exposure causes vascular oxidative stress and dysfunction: evidence for a close connection to brain damage and a key role of the phagocytic NADPH oxidase (NOX-2), European Heart Journal, , ehz772, https://doi.org/10.1093/eurheartj/ehz772
- abc.es
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Dr. Rigoberto J. Marcano Pasquier @rigotordoc
Medicina Interna
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