Elogio del descaro… | Por: Dr. Rafael Muci-Mendoza
¨Una mujer se suicida por la escasez de alimentos. A pesar del problema nervioso que tenía la dama, su hermana la calificó como una mujer intachable, querida por sus hijos, amable, buena hermana y cariñosa. Las deudas y la preocupación de no tener cómo darle comida a sus hijos hicieron que Regina cayera en crisis…¨.
El hambre es apenas uno de los síntomas del colapso económico y de una vil dictadura que sabe que mediante este mecanismo mantiene a la población ocupada y mansa pues el fin de quedarse en el poder, justifica los medios para lograrlo, aun valiéndose del genocidio…
Según el DRAE, Descaro: Desvergüenza, atrevimiento, insolencia, falta de respeto.
La Encuesta sobre Condiciones de Vida (Encovi), llevada a cabo en los meses de agosto y septiembre de 2015 por tres universidades nacionales, indicó que 87% de los consultados que no tenía suficientes ingresos para comprar alimentos.
El origen de esta catástrofe fue y sigue siendo el resultado de mantener los precios artificialmente bajos, lo cual ha creado profunda escasez y una gravísima inflación que, según el Banco Central, llegó a 180,9% anual en el cuarto trimestre de 2015, hasta 82,4% en el primer trimestre del mismo año pues los consumidores por fuerza de la circunstancia, se ven obligados a acudir al mercado negro en busca de lo que necesitan y luego, si es que pueden, pagar mucho por ello…
¨Es irrespetuoso considerar que en nuestro país hay una crisis humanitaria…¨
Así dijo, insuflada de la vanidad que cree cubrir la mentira, en el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) la Canciller de la República Bolivariana de Venezuela, estado fallido, Delcy Rodríguez, con sus ojitos apurruñados hechos línea, asegurando que defenderán ¨la verdad sobre Venezuela¨, pues se ha tejido la ¨falsa tesis¨ de que no hay alimentos…, ¨hay una campaña de desinformación contra nuestro país, más de 300 medios vendían la conseja de que Venezuela no tenía que comer y que los supermercados estaban vacíos.
Solo los medios ¨alternativos¨ -el entrecomillado es mío- lograron desmentir esta infamia y mostraron las imágenes de los anaqueles llenos¨, pero resulta que casi todos los medios de comunicación escritos, radiales y televisivos, o son propiedad, o están controlados o pagados por el régimen. ¨En Venezuela se han importado alimentos para alimentar a tres países del tamaño del nuestro…¨, en su desvergüenza psicótica, hija de un poder que cree inacabable, dice o miente sin ningún pudor ni recato, tal como si dijera un mal chiste digno de ser festejado, como si todos a su alrededor no percibieran el hondo vacío, las miasmas de su alma torva, denigrando gratuitamente de la realidad de ese país que muestran a diario y al desnudo televisoras internacionales en todas las lenguas, visiones que no pueden taparse con un dedo…
El sufrimiento es muy grande señora, sacúdase la vanidad que le ciega, salga de la comodidad de su oficina, sacúdase su corte de lisonjeros y dese una vuelta este domingo de cielo de esplendente azul para que perciba el hedor de la falta de baño porque no hay agua ni jabón, ni afeites ni perfumes y vea en el rostro de cada venezolano la terrible impronta de la destrucción que alegremente ustedes han conducido…
Colas por doquier, que no son filas sino aglomerados de gentes trashumantes que van de un lado a otro, que esperan y desesperan, que con el alma en vilo no saben si cuando lleguen al final del viacrucis diario quedará algo para ellos; que no saben si llorar y resignarse o ser pasto de la rabia y la frustración, reclamar o tomar justicia por mano propia y asaltar y saquear cualquier mercado o bodega que se atraviese en el camino de sus angustias…
Este amasijo amorfo de ciudadanos que repta por las aceras y en la calle, madres desesperadas con niños a horcajadas en sus cuadriles porque la leche ni las vitaminas existen ni hay tratamiento para sus hijos enfermos, ancianos desvencijados por los años y la mala vida y ahora con hambre y detención de sus tratamientos, son tan protuberantes, pero tan protuberantes como los vicios de los revolucionarios, tan al margen de la ley, en abierta ruptura de los principios elementales de toda sana administración, tan expuestos en sus desmanes que no pueden ser ignorados ni ocultados… ¿Será que esta menuda mujer está alucinando o viendo visiones…? ¿Será que su insania le impide ver la realidad y tiene que tergiversarla e inventar otra realidad inexistente…? ¿Será que es solamente la suma de todas sus carencias psíquicas y de sus maldades existenciales…?
Cierto día en el futuro que ojalá no esté muy lejos, los venezolanos leeremos impresionados, incrédulos y con un dejo de sonrojo facial, la increíble historia de estos tiempos de vergüenza cuando el país fue y sigue siendo llevado en ventolera y sin atenuantes a un total colapso social, económico, de salud y de moral personal y ciudadana, a una increíble africanización de la sociedad. El gobierno al margen de la ley y del derecho se hizo enormemente rico al tiempo que con su corrupción envolvió a todos y cada uno de sus connacionales… El envilecimiento colectivo trasluce cuando llegamos hasta a desear la muerte ejemplar a los causantes de esta catástrofe…
Para salir de esta crisis tan profunda habrá que llevar adelante cambios grandes y difíciles que puedan lograr el saneamiento de las estructuras de poder en un plazo razonable para transformar el país rentista sin controles en una nación moderna, equilibrada y productiva. Todavía contamos con una extraordinaria reserva de hombres y mujeres dispuestos a empujar los cambios dolorosos que serán necesarios.
Dr. Rafael Muci-Mendoza
Médico internista / Neuro-oftalmólogo clínico
Individuo de número de la Academia Nacional de Medicina de Venezuela
