El sueño deficiente puede aumentar la susceptibilidad a comer más y hacer aumentar de peso | Por: @linternista

Según resultados de una investigación preliminar presentada en el Congreso Europeo de Endocrinología 2017, el sueño deficiente puede aumentar la susceptibilidad a comer más y hacer aumentar de peso. Científicos suecos dicen que una calidad de sueño deficiente y menos horas de sueño pueden estimular la producción de la hormona que despierta el hambre. Los investigadores mencionan que puede afectar la forma en que el cuerpo genera energía a partir del alimento.

Cada vez más personas está teniendo problemas de sueño en nuestro mundo moderno sin descanso. Una serie de estudios se ha enfocado en cómo el insomnio puede afectar la capacidad del organismo para metabolizar energía.

Christian Benedict de la Universidad de Upsala, quien dirigió el estudio, dice que aún no se ha esclarecido la causa fundamental del aumento en el riesgo de obesidad por alteración del sueño, aunque podría deberse a cambios en apetito, metabolismo, motivación, actividad física o una combinación de factores.

El Dr. Benedict y su grupo han realizado una serie de estudios acerca del efecto del sueño deficiente sobre el metabolismo energético. «Después de un sueño deficiente, las personas de peso normal prefieren raciones de alimento más grandes, buscan más calorías, muestran signos de aumento de la impulsividad relacionada con el alimento, experimentan más placer con el alimento y gastan menos energía», puntualizó.

Hormonas del hambre

Los últimos hallazgos, presentados en el European Congress of Endocrinology en Lisboa, Portugal indican que la deficiencia del sueño parece favorecer las hormonas que nos hacen sentir hambre.

«Nuestros estudios también implican que el sueño deficiente desvía el equilibrio hormonal de las hormonas que favorecen la saciedad, como la hormona intestinal péptido similar a glucagón de tipo 1, a las que favorecen el hambre, como la hormona gástrica ghrelina», agrega el Dr. Benedict.

La restricción del sueño también aumenta las concentraciones de endocannabinoides, que están vinculados con el apetito, señalan los hallazgos.

Los investigadores informan que la deficiencia de sueño también afecta al equilibrio de las bacterias intestinales, lo que se ha implicado ampliamente como decisivo para mantener cómo nuestros cuerpos procesan el alimento para convertirlo en energía.

Otros factores relacionados con la salud

Según el Dr. Benedict: «Mis estudios señalan que el sueño representa un pilar importante de la salud metabólica, incluido el mantenimiento de peso».

«Sin embargo, se debe tener presente que nuestra salud depende de una interacción de diversos factores modificables (por ejemplo, ejercicio, dieta, exámenes de salud periódicos) y factores no modificables (por ejemplo, los genes) y no sólo del sueño. En otras palabras, dormir alrededor de siete horas, según lo recomiendan expertos en sueño, no beneficiará a la salud si el estilo de vida es por lo demás un desorden».

Estos son resultados que deben considerarse con cautela, ya que aún no se han publicado en una revista indizada revisada por pares.

Referencia: Benedict C. Candidate mechanisms underlying the association between poor sleep and obesity. European Congress of Endocrinology (ECE) 2017. Presentado el 23 de mayo de 2017. Lisboa, Portugal.

Fuente: espanol.medscape.com