Hábitos saludables en tan solo 3 pasos | Por: @linternista
Lograr incluir costumbres saludables en nuestras vidas no es nada fácil. Pero, por qué cuesta tanto si tan solo se trata de llevar una vida más sana, empezar a hacer ejercicios, comer más sano, controlar mejor el estrés y dejar de hacer cosas que no benefician a nuestro organismo.
Cuántas veces hemos intentado deshacernos de alguna de estas malas costumbres y ha sido infructuoso. Verdaderamente es difícil, sí. Pero no hay que desesperarse, hay formas de lograrlo y aquí te comentamos algunas.
Una investigación realizada por la Universidad de Bristol y University College London, ambas en Inglaterra, detectaron una gran variedad de teorías de cambio conductuales, identificando 83 modelos para tratar de modificar el comportamiento de una persona.
B.J. Fogg, fundador del Laboratorio Tecnológico de Persuasión de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, y quien se ha dedicado al estudio del comportamiento humano por más de 20 años, dice que el modelo para cambiar hábitos puede ser más sencillo de lo que parece.
Según Fogg solo tres cosas pueden modificar el comportamiento de una persona a largo plazo: es definir claramente qué se quiere lograr, se deben crear metas claras.
«Tener una epifanía, hacer cambios en el ambiente que te rodea y dar pasos de bebé», dijo el científico en una charla TED. Como la primera es difícil de lograr, las otras dos se pueden practicar.
«La clave es un tanto controversial: lo que hay que visualizar y concebir no es el objetivo final, sino las acciones y el comportamiento que te llevarán a conseguir lo que quieres», indica el experto.
«En este contexto, la motivación y la fuerza de voluntad no son efectivas para lograr cambios a largo plazo», dijo.
Y es así, como llegamos a los tres pasos que harán la diferencia la próxima vez que intentes introducir un hábito saludable en tu vida.
Es importante ir paso a paso, no puedes pretender introducir muchos cambios de un día a otro, la clave es ir poco a poco.
Primer punto
Objetivo simple
Plantearse ¿qué quieres lograr? Lo primero que tienes que hacer es definir claramente tu objetivo.
Ejemplo de esto es si quieres tener una dieta más saludable y hacer ejercicios.
Segundo punto
Hacerlo sencillo y simple
¿Cómo vas a lograrlo? Es concebir acciones sencillas que te permitan llegar a la meta.
En cuanto a la alimentación, el consumo de frutas y vegetales es definitivamente una medida que te acercará al objetivo de comer mejor.
El equivalente en lo que respecta a la actividad física, podría ser hacer abdominales.
En este método, la fuerza de voluntad y la motivación no son tan importantes.
Tercer punto
Adecuar el comportamiento
Pon en práctica la acción que tienes que tomar para acercarte al objetivo. Incluye algún elemento que te ayude adquirir una rutina de tu día a día, sin producir en ella ningún cambio.
Volviendo a la dieta y a los ejercicios, se traduce en lo siguiente: Si cada mañana lo primero que haces es tomar una rica taza de café, entonces coloca una manzana al lado de la cafetera.
Planifica el momento en el que empezarás haciendo los abdominales, puedes hacerlo cada vez que vayas al baño.
En la medida en la que de forma automática incluyas en tu rutina una acción que te acerca a tu objetivo sin mayor esfuerzo, podrás ir añadiendo otras.
La suma de estos «hábitos minúsculos», como los llama Fogg, te permitirá llegar a la meta.
Y un elemento fundamental: cada vez que hagas una de esas acciones, celébralo.
Fuente: BBC Mundo