Pemafibrato: Nuevo fármaco japonés que mejora el perfil de lípidos en la diabetes mellitus | Por: @linternista
Según los resultados de un estudio clínico japonés de fase 3, publicados el 3 de enero en la versión electrónica de Diabetes Care, un nuevo modulador selectivo de receptor alfa activado por proliferador de peroxisomas, el pemafibrato, puede mejorar significativamente los perfiles de lípidos y la resistencia a la insulina en pacientes con diabetes de tipo 2 e hipertrigliceridemia.
Los hallazgos siguen a los de varios estudios a gran escala que muestran que el tratamiento con fibratos disminuye los niveles de triglicéridos y aumenta los niveles de colesterol de lipoproteínas de gran densidad (HDL) y de manera subsiguiente reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular aterosclerótica en pacientes con diabetes de tipo 2.
El estudio actual, en el que participaron más de 160 pacientes, indica que el pemafibrato también reduce significativamente los niveles de triglicéridos y colesterol no-HDL y aumenta los niveles de c-HDL, en comparación con placebo.
Además, el pemafibrato se relacionó con disminuciones significativas en la resistencia a la insulina, aunque no resultó afectado el control de la glucemia y los niveles de colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL).
El agente farmacológico «demostró eficacia excelente para corregir las anomalías de los lípidos y fue bien tolerado en pacientes con diabetes de tipo 2», afirman los investigadores, dirigidos por el Dr. Eiichi Araki, Ph. D., del Departamento de Medicina Metabólica, en la Facultad de Ciencias Biológicas, de la Kumamoto University, en Kumamoto, Japón.
Añaden: «Estos hallazgos proporcionan información importante sobre el tratamiento de las anomalías de lípidos en pacientes con diabetes de tipo 2 que tienen hipertrigliceridemia concomitante».
Según el Dr. Araki, el pemafibrato fue aprobado para el tratamiento de la hiperlipidemia en Japón en el 2017.
Kowa Company ahora está llevando a cabo el estudio global PROMINENT, que evaluará el efecto del pemafibrato sobre variables cardiovasculares en pacientes con diabetes de tipo 2 y dislipidemia aterogénica. El Dr. Araki dijo que, si resultan positivos, los resultados se utilizarán como la base para solicitudes de aprobación del fármaco en todo el mundo.
Datos de 24 semanas en pacientes con diabetes de tipo 2 que reciben agentes orales
El estudio actual de fase 3, controlado con placebo, aleatorizado, doble ciego, con grupo paralelo, se realizó en 34 centros en Japón, en pacientes con diabetes de tipo 2 e hipertrigliceridemia concomitante. Era requisito que los participantes tuviesen 20 o más años de edad y en el caso de las mujeres, que fuesen posmenopáusicas, con una HbA1c ≥ 6,2% y concentraciones séricas de triglicéridos en ayunas ≥ 150 mg/dl en dos consultas consecutivas. Además, los pacientes debían haber completado 12 semanas o más de asesoramiento dietético o de ejercicio.
Se excluyó a los individuos con concentraciones séricas de triglicéridos de > 1.000 mg/dl y a aquellos con diabetes mal controlada, trastornos tiroideos o hipertensión, o que precisaron tratamiento con insulina, entre varios otros criterios.
En total, 167 pacientes fueron aleatorizados para recibir placebo (n = 57), pemafibrato, 0,2 mg/día (n = 54), o pemafibrato, 0,4 mg/día durante 24 semanas. Los participantes continuaron con el tratamiento durante otras 28 semanas (periodo durante el cual al grupo que recibió placebo se le cambió a una dosis de 0,2 mg de pemafibrato); no obstante, el análisis actual se enfocó en el periodo inicial de 24 semanas.
La media de edad de los pacientes era 60,5 años, 72,9% eran del género masculino y la media del índice de masa corporal fue 25,9 kg/m2.
La media de duración de la diabetes fue 5,7 años, y 44,6% de los pacientes estaban recibiendo uno o dos antidiabéticos. Las estatinas también se prescribieron en 39,2% de los pacientes. No hubo diferencias notables entre los grupos de tratamiento.
Las cifras medias de triglicéridos séricos en ayunas iniciales eran 284,3 mg/dl en el grupo con placebo, 240,3 mg/dl en el grupo con pemafibrato a 0,2 mg/día y 260,4 mg/dl en el grupo con pemafibrato a 0,4 mg/día.
A las 24 semanas, el cambio porcentual en las concentraciones séricas de triglicéridos fue -10,8% para el placebo (p < 0,01 frente al inicio), -44,3% para la dosis de 0,2 mg (p < 0,001) y 45,1% para la dosis de 0,4 mg (p < 0,001), respectivamente, y los dos grupos con pemafibrato tuvieron reducciones significativas en comparación con el placebo (p < 0,001).
Además, los grupos con pemafibrato mostraron reducciones significativas en el colesterol no HDL, colesterol de lipoproteína remanente y algunas medidas de apolipoproteína, así como incrementos significativos en el colesterol-HDL.
Sin embargo, los niveles de c-LDL no cambiaron significativamente en quienes recibieron pemafibrato.
Los pacientes tratados con 0,2 mg de pemafibrato al día presentaron reducciones significativas en las puntuaciones de resistencia a la insulina en el Homeostasis model assessment of insulin resistance (HOMA), en comparación con el placebo. El fármaco también se relacionó con incrementos importantes en las concentraciones del factor de crecimiento del fibroblasto 21.
No obstante, no hubo cambios significativos en la glucosa plasmática en ayunas, la insulina en ayunas, la glucoalbúmina o la HbA1c relacionados con pemafibrato.
En términos de inocuidad, no hubo diferencias importantes en la frecuencia de algún efecto adverso entre los grupos con placebo y pemafibrato.
«El pemafibrato corrigió en grado significativo las anomalías de los lípidos y fue bien tolerado en pacientes con diabetes de tipo 2 que también tenían hipertrigliceridemia», concluyeron los investigadores.
El pemafibrato es promisorio para los triglicéridos altos y el c-HDL bajo
Al comentar los hallazgos, el Dr. Araki dijo que aunque el pemafibrato no mejoró los niveles de colesterol-LDL, este «básicamente puede controlarse con estatinas y, por tanto, el pemafibrato sería una opción de tratamiento promisoria para tratar los triglicéridos elevados y el colesterol-HDL reducido, los cuales resaltan como riesgos de lípido residual más allá del colesterol-LDL».
Añadió que «no está claro a este momento» por qué la resistencia a la insulina mejoró significativamente con el fármaco, pero que no hubo una mejora correspondiente en el control de la glucemia, según se evaluó por los niveles de HbA1c.
«Dado que el pemafibrato no es un agente antidiabético, no es de esperar una mejora significativa en el control de la glucemia, pero al menos no mostró efectos adversos sobre el control de la glucemia».
Añadió que se necesita la «acumulación de datos de la vida real» y resultados en pacientes no japoneses «para confirmar la eficacia y la tolerabilidad del pemafibrato en personas con diabetes de tipo 2».
Conflictos de interés: El estudio fue financiado por Kowa Company. El Dr. Araki informó recibir honorarios personales de Kowa Company durante el estudio; apoyos económicos de Nippon Boehringer-Ingelheim, Novo Nordisk Pharma, Ono Pharmaceutical, Sanofi, Daiichi Sankyo, Mitsubishi Tanabe Pharma, Novartis Pharma, Kowa Pharmaceutical, Astellas Pharma, AstraZeneca, Takeda Pharmaceutical, Taisho Toyama Pharmaceutical y Pfizer Japan; y honorarios personales de MSD, Nippon Boehringer Ingelheim, Novo Nordisk Pharma, Ono Pharmaceutical, Sanofi, Daiichi Sankyo, Mitsubishi Tanabe Pharma, Novartis Pharma, Kowa Pharmaceutical, Astellas Pharma, AstraZeneca, Takeda Pharmaceutical, Taisho Toyama Pharmaceutical y Eli Lilly Japan ajenos al estudio remitido.
Fuente: espanol.medscape.com
Referencia: Araki E, Yamashita S, Arai H, Yokote K, y cols. Effects of Pemafibrate, a Novel Selective PPARα Modulator, on Lipid and Glucose Metabolism in Patients With Type 2 Diabetes and Hypertriglyceridemia: A Randomized, Double-Blind, Placebo-Controlled, Phase 3 Trial. Diabetes Care. 3 Ene 2018. pii: dc171589. doi: 10.2337/dc17-1589. PMID: 29298800. Resumen