Respirar aire contaminado aumenta considerablemente el riesgo de enfermedades del riñón | Por: @linternista
Según muestra un nuevo estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad Médica Meridional en Cantón (China), respirar aire contaminado también aumenta, y mucho, el riesgo de enfermedades del riñón.
Como explica Fan Hou, director de esta investigación publicada en la revista «Journal of the American Society of Nephrology», «nuestro resultado principal es que la frecuencia de glomerulonefritis membranosa se ha duplicado en China en tan solo una década. Y como muestra nuestro trabajo, este incremento se asocia muy estrechamente con la distribución de las partículas en suspensión».
La contaminación es, más que perjudicial para la salud, directamente mortal. No en vano, esta contaminación atmosférica es responsable cada año de la muerte de más de 25.000 personas solo en nuestro país. Además, y según alerta un reciente estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la cifra global de muertes prematuras globales por la contaminación, hasta 2.933.300 en 2010, se duplicará o incluso triplicará para el año 2060 de mantenerse la tendencia actual. Y es que la inhalación de las partículas en suspensión provoca enfermedades como, entre otras, las cardiovasculares, las respiratorias y el cáncer.
Contaminación ‘renal’
El reciente ‘boom’ económico e industrial en China ha provocado, entre otras muchas consecuencias, que el país sufra un grave problema de contaminación. Un mal que no solo se limita a la capital, Pekín, sino que se extiende por todas las áreas urbanas del gigante asiático. Sin embargo, y si bien es lógico suponer que esta polución atmosférica conlleva graves consecuencias para la salud pública, aún se desconoce el impacto que tiene directamente sobre la salud individual.
Por ello, el objeto del nuevo estudio fue evaluar el posible efecto de la contaminación sobre la salud renal de los ciudadanos de toda China. Y para ello, los investigadores analizaron las biopsias renales tomadas a lo largo de 11 años a un total de 71.151 pacientes de todas las edades en 938 hospitales de 282 ciudades chinas.
Los resultados mostraron que la prevalencia de glomerulonefritis membranosa, trastorno autoinmune de los riñones que puede desembocar en una insuficiencia renal, se ha incrementado a un ritmo de un 13% anual a lo largo de los 11 años de estudio. Sin embargo, parece que la frecuencia del resto de enfermedades graves del riñón ha permanecido estable a lo largo de este período.
Es más; como resultaba esperable, el aumento de la frecuencia de la glomerulonefritis membranosa no ha sido uniforme en todo el país.
Como concluye Fan Hou, «las regiones con niveles más elevados de pequeñas partículas en suspensión presentan las mayores tasas de enfermedad».
Fuente: abc.es