El divorcio como factor de riesgo de infarto es mas importante entre las mujeres | Por: @linternista
La Fundación Española del Corazón (FEC) con motivo de la celebración del día de San Valentín quiere aprovechar para recordar cómo el estado amoroso de una persona puede influir en su salud cardiovascular.
Esta fundación lo hace a través del análisis de la investigación «Association between divorce and risks for acute Myocardial Infarction». Este trabajo fue realizado de Estados Unidos y publicado en la revista Circulation el 14 de abril de 2015 y trató de analizar la relación existente entre el estado civil de una persona y su riesgo de padecer un infarto. Para ello, estudió a 15.827 personas.
El divorcio es un factor de estrés importante de la vida que puede tener consecuencias económicas, emocionales y físicas para la salud. Sin embargo, la asociación acumulada entre el divorcio y los riesgos para el infarto agudo de miocardio (IAM) es desconocida. Este estudio investigó la asociación entre la exposición de por vida al divorcio y la incidencia de IAM en adultos en Estados Unidos.
Se utilizaron los datos representativos a nivel nacional en Estados Unidos de una cohorte prospectiva de adultos casados en algún momento entre 45 a 80 años y que fueron seguidos cada dos años, de 1992 a 2010. Aproximadamente el 14% de los hombres y el 19% de las mujeres estaban divorciados al inicio del estudio y más de un tercio de la cohorte tenía ≥1 divorcio en su vida. En 200.524 personas-años de seguimiento, 8% (n = 1.211) de la cohorte tuvieron un IAM y las tasas edad–específicas de IAM fueron consistentemente más altos en los divorciados en comparación con los que estaban continuamente casados (P <0,05 ).
Los resultados de los modelos de riesgo de riesgo mostraron que los riesgos de IAM fueron 24% mayores (significativamente) en las mujeres que tenían 1 divorcio (razón de riesgo: 1,24) y 77% mayores en aquellas con ≥2 divorcios (razón de riesgo: 1,77) y 35% mayores entre aquellas que se volvieron a casar (razón de riesgo: 1.35) en comparación con las mujeres casadas de forma continua después de ajustar por múltiples factores de riesgo.
Los riesgos ajustado multivariables aumentaron 30% solamente en los hombres con un historial ≥ 2 de divorcios (razón de riesgo: 1,30) en comparación con los hombres casados de forma continua. Los hombres que se volvieron a casar no tuvieron ningún riesgo significativo para el IAM. Los términos de interacción para el sexo no fueron estadísticamente significativos.
«La conclusión del estudio es que mientras se sabe que el infarto afecta más a los hombres, el divorcio como factor de riesgo de esta enfermedad es mas común entre las mujeres», afirma el Dr. Lorenzo Silva, secretario general de la FEC.
Otro dato que aporta esta investigación es que si un hombre vuelve a casarse reduce este riesgo, mientras que en el caso de la mujer se mantiene igual. Únicamente, el divorcio afecta de forma más elevada a los hombres es cuando éstos han sufrido dos o más separaciones en su vida, pero las cifras siguen siendo más altas en las mujeres.
«Está relación está documentada entre la relación del estrés crónico, como puede ser un divorcio y el aumento del riesgo cardiovascular. Así, el estrés provoca reacciones biológicas en nuestro organismo como aumento de la presión sanguínea y la hemoglobina glicosilada que puede provocar la coagulabilidad de la sangre», señala el secretario general de la FEC.
El uso de estos resultados, «se trata de un indicador más del papel que juega el estrés en nuestra salud. Por ello, es importante considerar el estado amoroso de una persona para valorar su riesgo cardiovascular», afirma el Dr. Silva.
Fuentes:
- larazon.es
- http://circoutcomes.ahajournals.org/content/early/2015/04/13/CIRCOUTCOMES.114.001291.full.pdf+html