CuriosidadesEnfermedades infecciosas

Bajas temperaturas y pocos mosquitos hacen hasta el momento unos juegos libres de Zika | Por: @linternista

Hasta ahora, en el evento que espera al menos un millón de asistentes, la mitad de ellos extranjeros, todo bien en los Juegos Olímpicos que muchos temían serían los Juegos de Zika.

Río de Janeiro no ha resultado ser el criadero de Zika que algunos atletas y turistas temían. A pesar de algunos días de calor, las temperaturas más frías parte del invierno brasileño significan que la población de mosquitos responsables de la propagación del virus ha disminuido.

Y en Río no se reportó una epidemia tan grave como muchos científicos habían temido a principios de este año. Incluso con miles de casos de zika notificados durante los meses más calurosos, Río no se afectó por el virus como el noreste de Brasil, por razones que los científicos y el gobierno todavía no comprenden.

 

Aún es temprano

El brote del virus de Zika se detectó por primera vez el año pasado en Brasil, donde se ha vinculado con más de 1700 casos de microcefalia en los bebés de madres infectadas. No hay vacuna contra el virus del Zika, que por lo general en las personas infectadas sólo causa síntomas leves parecidos a la gripe.

El virus se sigue propagando en todo el mundo y ha afectado al menos 54 países, según la Organización Mundial de la Salud. Eso incluye a los Estados Unidos, donde las autoridades dijeron el lunes que estaban investigando un nuevo caso de transmisión local en Florida.

Igualmente hay que considerar que aún es temprano en los Juegos Olímpicos. Cualquier aumento sostenido de la temperatura, aunque no se espera hasta finales del año con el inicio del verano, podría provocar un rebote en la población de mosquitos. Y aquellos que contraen el virus normalmente lo hacen los pocos días de haber sido picado por un mosquito infectado con el virus de Zika.

Pero con muy pocos casos de zika identificados en Río en las últimas semanas, los propios mosquitos, si aparecen, tienen pocas fuentes de recogerlo. Aedes aegypti, el principal vector del virus de Zika, lo transmite al picar a una persona infectada y luego pasa a otra.

En comparación con enero, cuando se notificaron más de 7700 casos de Zika en Río, durante el mes de julio sólo se notificaron unos 140 casos, de acuerdo a datos municipales hasta el 28 de julio, los más recientes disponibles.

Varios competidores, incluyendo los golfistas Jason Day y Rory McIlroy, no participaron en los juegos debido al virus de Zika y algunos decidieron participar, pero expresaron su preocupación acerca de la enfermedad, como la heptatleta británica Jessica Ennis y la portera de la selección femenina de fútbol de los Estados Unidos, Hope Solo.

Pero el tema se ha apagado entre los deportistas: «Ni siquiera he oído a nadie hablar de ello», dijo Helen Glover, parte del equipo británico de remo y medallista de oro en Londres 2012, denotando el bajo nivel de preocupación.

Dejando poco al azar

Sin embargo, las autoridades locales y los organizadores de los Juegos se mantienen cautelosos. «No podemos dejar esto al azar», dijo Mario Andrada, un portavoz de los organizadores locales, a periodistas en una sesión informativa el lunes, haciendo hincapié en que durante los Juegos permanecerán implementadas las medidas anti-mosquitos que han sido usadas durante meses.

Además de aire acondicionado en las habitaciones de los deportistas, con la intención de evitar que se abran las ventanas por las altas temperaturas, los funcionarios olímpicos han proporcionado dispensadores gratuitos de repelente de insectos en la Villa Olímpica, asi como en las instalaciones de entrenamiento y competencia.

Agentes municipales de salud han estado recorriendo los lugares y sitios turísticos populares para eliminar el agua estancada y otras áreas en las que ponen huevos los mosquitos Aedes.

Mientras tanto, los Juegos Olímpicos son todavía un escenario para la venta de productos relacionados con el virus de Zika por las empresas que se aprovechan del miedo al virus. Allí la propaganda va desde los repelentes de insectos hasta los preservativos que promocionan ser a prueba de zika – a pesar de que cualquier preservativo sería suficiente en la protección contra los raros casos de transmisión de virus de Zika a través del semen.

Dada la falta de mosquitos, la mayoría de los visitantes se sacuden cualquier preocupación. «No traje ningún repelente», dijo Sophie Bahgeri, de 25 años de edad, una australiana que pasea por la playa.

Incluso los que tienen una mayor razón para preocuparse dicen que están mucho más relajados sobre el virus de lo que habían estdo.

«No puedo recordar a la última persona que escuché había padecido de enfermedad por el virus de Zika,» dijo Fabiana Macedo, un residente de 30 años de edad, de Tabajares, una favela de Río, cuya densidad de población y deficiente saneamiento es el tipo de comunidad más afectada por el brote.

Fuente: Reuters

Comité editorial medicinapreventiva.info

Comité editorial de medicinapreventiva.info

Deja un comentario

A %d blogueros les gusta esto: