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La fibrilación auricular de inicio reciente es un predictor de riesgo para cáncer futuro | Por: @linternista

En un reciente estudio de análisis de cohortes del Women’s Health Study (Estudio de la Salud de las Mujeres) publicado el 25 de mayo de 2016 en la versión electrónica de JAMA Cardiology, se concluye que la fibrilación auricular de inicio reciente es un predictor independiente del riesgo para cáncer futuro.

Según los resultados, el riesgo de aparición de cáncer es tres veces mayor en los primeros tres meses después de un diagnóstico de fibrilación auricular (razón de riesgo [RR]: 3,54; p < 0,001) y se mantiene significativamente más alto después de un año (RR: 1,42; p < 0,001), aun después del ajuste con respecto a posibles factores de confusión como tabaquismo, alcohol y hormonoterapia restitutiva.

Por el contrario, el riesgo de presentación de fibrilación auricular en las mujeres con cáncer se incrementó únicamente en los primeros tres meses después de su diagnóstico de cáncer (HR: 4,67; p < 0,001) y no a partir de entonces (HR: 1,15; p = 0,15).

Según el investigador principal, el Dr. David Conen (Hospital Universitario, Basilea, Suiza), «la parte más interesante de esta relación es el incremento a largo plazo del riesgo de cáncer tras la fibrilación auricular. Esto parece indicar que no sólo las neoplasias malignas ya han estado allí, sino que existe una verdadera interrelación».

El sesgo de detección podría explicar los hallazgos en virtud de que las mujeres con fibrilación auricular tienen más contacto con el sistema de salud y, por consiguiente, una mayor probabilidad de que se les diagnostique su cáncer. «Sin embargo, si esto fuese verdad, entonces también debiéramos tener un incremento de los casos de fibrilación auricular a largo plazo después del cáncer, ya que estas pacientes con cáncer también tienen mucho más contacto con el sistema de atención médica», dijo.

La literatura contiene varios estudios sobre el cáncer como un factor de riesgo para la fibrilación auricular, a menudo atribuido a los efectos secundarios de la quimioterapia o del tratamiento quirúrgico del cáncer, sobre todo torácico, o a la invasión directa del corazón por el cáncer.

Sin embargo, se dispone de muy pocos datos sobre la fibrilación auricular que precede a un diagnóstico de cáncer. Investigadores daneses recientemente notificaron un incremento de cinco tantos en el riesgo de cáncer en los primeros tres meses después del diagnóstico de fibrilación auricular, pero a partir de entonces el riesgo fue pequeño y 57% de los tumores malignos eran metastásicos, lo que indica que es improbable que la fibrilación auricular haya sido la causa. [2]

Análisis de cohortes prospectivas

Para el presente estudio, 34.691 mujeres sanas de por lo menos 45 años de edad fueron objeto de seguimiento prospectivo en el Estudio de Salud de las Mujeres, un estudio aleatorizado del ácido acetilsalicílico y la vitamina E para la prevención de las enfermedades cardiovasculares y el cáncer. Durante una mediana de seguimiento de 19,1 años, se diagnosticó fibrilación auricular de inicio reciente en 1467 (4,2%) pacientes y cáncer en 5130 (14,8%).

Entre los pacientes con diagnóstico de fibrilación auricular de inicio reciente, 10% presentaron cáncer durante el seguimiento. El riesgo absoluto de cáncer observado en mujeres con y sin fibrilación auricular fue moderado en 1,4 y 0,8 episodios por 100 años-persona de seguimiento.

El tipo de fibrilación auricular no desempeñó un rol significativo y se comunicaron cálculos de riesgo similares para las mujeres que presentaron fibrilación auricular paroxística (RR: 1,37; p = 0,004) y no paroxística (RR: 1,50; p = 0,003).

Las mujeres con diagnóstico de fibrilación auricular tuvieron un riesgo significativamente más alto de cáncer de colon (RR: 2,11; p = 0,002), pero ningún cáncer de mama o de pulmón. La fibrilación auricular no se relacionó en grado significativo con la mortalidad por cáncer en los modelos ajustados con respecto a múltiples variables (RR: 1,32; p = 0,07).

Dijo que es necesaria la investigación en cohortes de uno y otro género sexual para confirmar los hallazgos, pero es probable que los hombres con fibrilación auricular también tendrían un incremento del riesgo de cáncer.

En un editorial complementario, los Dres. Faisal Rahman, Darae Ko y Emelia Benjamin (Escuela de Medicina de la Universidad de Boston, Massachusetts) estuvieron de acuerdo con los investigadores en que: «La fibrilación auricular muy probablemente representa un marcador de riesgo para diagnósticos futuros de cáncer», y dicen que el estudio tiene varias fortalezas, entre ellas, su extenso tamaño de la muestra, escasos datos faltantes, la capacidad de tomar en cuenta múltiples factores de confusión potenciales y la adjudicación a los diagnósticos de cáncer y fibrilación auricular.

Sin embargo, los editorialistas señalan: «Varios factores se contraponen a la detección sistemática» con un diagnóstico de FA reciente, por ejemplo, el riesgo absoluto bajo de cáncer, los posibles costos y luego la repercusión de la detección sistemática.

El Dr. Conen estuvo de acuerdo en que los datos todavía no son suficientes para recomendar cambios sistemáticos para la detección de cáncer en pacientes con fibrilación auricular, pero dijo que en estas pacientes está justificado un seguimiento estrecho en virtud de que cuentan con riesgo de otras enfermedades, como insuficiencia cardiaca y accidente cerebrovascular, no sólo cáncer. «Debiéramos tratar exhaustivamente sus factores de riesgo: tabaquismo y obesidad. Esto podría ayudar no sólo para la prevención del cáncer, sino también para el riesgo de recidiva. Tomar en cuenta los factores de riesgo probablemente es el mensaje fundamental más importante, y examinar muy bien a los pacientes».

Factores de riesgo compartido

La fibrilación auricular y el cáncer tienen en común varios factores de riesgo, entre ellos, obesidad, consumo de alcohol, tabaquismo, hipertensión y diabetes, pero datos emergentes también parecen indicar que la fibrilación auricular no está circunscrita a la afectación de la aurícula izquierda, sino a más de una enfermedad sistémica con un aumento de la trombogenicidad y la inflamación, dijo.

Los editorialistas puntualizaron que es más probable que las relaciones informadas entre la fibrilación auricular e infarto del miocardio, insuficiencia cardiaca, nefropatía crónica y tromboembolia venosa tengan «una verdadera causalidad bidireccional», pero que los mecanismos subyacentes que explican la relación entre la fibrilación auricular y el cáncer «pueden ser más complicados y cabe la posibilidad de una relación bidireccional entrelazada con una amplia gama de factores».

Tanto los editorialistas como los investigadores recomiendan más investigación sobre las interrelaciones complejas entre la fibrilación auricular y el cáncer, sobre todo ante una población que envejece y una mayor morbilidad de factores de riesgo.

Fuente: espanol.medscape.com

Referencias:

  1. Conen D, Wong JA, Sandhu RK, y cols. Risk of malignant cancer among women with new-onset atrial fibrillation.JAMA Cardiol 2016; DOI: 10.1001/jamacardio.2016.0280. Artículo

  2. Ostenfeld EB, Erichsen R, Pedersen L, y cols. Atrial fibrillation as a marker of occult cancer. PLoS One 2014; DOI:10.1371/journal.pone.0102861. Artículo
  3. Rahman F, Ko D, Benjamin EJ. Association of atrial fibrillation and cancer. JAMA Cardiol 2016; DOI: 10.1001/jamacardio.2016.0582. Editorial

Comité editorial medicinapreventiva.info

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